Divino Castigo: Las horas más oscuras



Divino Castigo: Las horas más oscuras

Atormentado nuevamente a causa de un sufrimiento antaño, despierto en medio de una atmósfera tan oscura, fría, y solitaria que solo la incomprensible madrugada puede otorgar. Castigado, inclusive en aquel mundo en donde la felicidad deja de ser un enigma y se materializa en una verdad; soy despojado de ella de la misma atroz manera en la que me fue arrebata el alma , la esperanza y el deseo alguno de continuar permaneciendo en este mundo. El supuesto mundo neutro, tierra de nadie, en donde los únicos responsables de que siga orbitando incesantemente, son sus herederos, aquellos para los cuales fue creado y a los cuales pertenece. Sin embargo, por más cuentos escritos que figuren o maticen ésta realidad en sus letras, tengo por una gran convicción el hecho de que ésta es solamente una mentira más de todas aquellas que navegan libremente por los océanos, fruto de las lagrimas de sufrimientos , dolor y pena brotadas de los ojos de mis semejantes. 

Un mundo sumergido en lagrimas, fuente eterna de tormentos y tan solo somos más que simples esclavos de agonías. Esclavos de sueños e ilusiones a lo cual denominados convincentemente felicidad, misma que con el devenir del tiempo se nos es arrebatada de la manera más atroz posible, de una manera tan repugnante, dado a que en ese momento en que más la disfrutamos es en ese mismo instante en que nos apartan de ella. Sumisos por esencia de la esclavitud, después de arrebatada la felicidad, sufrimos bajo la idea de que aquello quizás no era para nosotros y nos reprimimos bajo la esperanza del que algo mejor estará por venir. Sufrimos constantemente hasta el día en que aquel agraciado anhelo se suscita nuevamente, sin embargo el anillo de dolor , el ciclo infinito del sufrimiento retorna nuevamente a su inicio. Somos las victimas de los actos llevados a cabo por aquellos que sin nosotros no son nada, aquellos para los cuales nosotros somos el centro entorno al cual gira todo su universo, somos las victimas de aquellos que nos necesitan. Dado a ello, hacen actos de presencia aquí en nuestro reinado, nos humillan y juegan con nosotros, nos intercambian y pelean por nosotros, no por el hecho de cuan valiosos seamos para ellos sino por un deseo de demostrar una superioridad entre ellos , sin importar nuestras felicidades. Somos tan solo los atormentados eternos que son infelices por aquellos actos que no pueden cometer así como de igual manera por aquellos que cometen. 

Entre las lagrimas, producidas por los hermosos y dolorosos tormentos busco refugio alguno en donde reposar y tomar el valor necesario para llevar a cabo el acto que culmine este sufrimiento. Sin embargo, pese a las profundas tinieblas bajo las cuales estoy sumergido puedo ser capaz de ver el rostro tan radiante y hermoso de mis dos eternos amores. Fijan su mirada tan misericordiosa en mi ser, y sin siquiera emitir sonido alguno, soy capaz de entender el porqué me acompañan en mis horas más oscuras. Me imploran y alientan a no culminar con mi propia mano el sufrimiento del cual soy preso, dado a que este podría significar la llegada de una desdicha eterna. Pese a ello, en las situación en que me encuentro, en donde mi espíritu y conciencia se encuentran agonizando dado al largo tiempo en que he cargado en mis hombros este tormentoso sufrimiento, no soy capaz de creer en lo que a través de mis ojos puedo ver. Después de todo...en este mundo...nada es como nuestros ojos nos dicen.

Comentarios

Entradas populares